Como cada año, México evalúa ha presentado su evaluación de la operación del sistema de justicia penal en cada entidad del país, así como a nivel federal, estableciendo distintos hallazgos relacionados con este.
Entre ellos, destacan varios puntos importantes, como el hecho de que las Defensorías Públicas, así como las Comisiones Ejecutivas de Atención a Víctimas, no cuentan con elementos y condiciones suficientes para significar un contrapeso real a las fiscalías, ya que reciben pocos recursos y no tienen suficiente apoyo.
Otro de los puntos es relacionado a la prisión preventiva oficiosa, que ha aumentado en un 21%, así como también los procedimientos abreviados en un 16%, considerando por parte de México Evalúa, que con esto se vulnera el derecho a la verdad y a la reparación del daño, ya que en la práctica, ningún delito se esclarece realmente, existe una reparación del daño de solo el .3% de las víctimas del delito. También se destaca que solo una de cada cuatro detenciones son calificadas como ilegales en México.
También destaca el índice de impunidad en el país, ya que el 94.8% de los delitos que se denuncian quedan impunes, dato que va directamente relacionado con la falta de capacidad de las fiscalías.
Aún así, hay estados que han disminuido su índice de impunidad, como son los casos de Zacatecas, Coahuila y Sinaloa, en un 15.1%, 6.6% y 6%, respectivamente.
En cuanto al Ranking Nacional de Avance en la Consolidación del Sistema de Justicia Penal, Querétaro se establece como un referente en cuanto a la operación del sistema, seguido de Nuevo León y Coahuila, estados que han consolidado la implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal, debido a la coordinación entre distintas instituciones, la planeación y la construcción de medios que facilitan que la información fluya. Por otra parte, los peor posicionados en el ranking fueron Veracruz, Guerrero y Campeche.
Finalmente, con relación a enfoques de género, la investigación revela que los derechos de las mujeres son menos respetados por parte de las fiscalías, ya que, por ejemplo, son forzadas o presionadas para dar una versión distinta de los hechos. Este tipo de presión se ejerce en mayor medida en mujeres que en hombres. Otro dato de importancia es que el 50% de las mujeres que enfrenta un proceso lo hace privada de su libertad mientras espera una sentencia, y al recibirla, obtienen penas mayores que los hombres por los mismos delitos.
En caso de tener interés por la investigación realizada por México Evalúa, puede ser descargada desde ESTE ENLACE.
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